Usualmente los autores que leo están muertos (salvando a Murakami y a Rosa Montero). Apuesto por lo seguro y leo clásicos o autores consagrados. Y sé que, como con la música, eso hace que pueda perderme de grandes cosas. 

Afortunadamente una querida amiga me recomendó —y prestó— "Los sorrentinos", de la joven autora Virginia Higa y menos mal...

La escritorio y traductora argentina, descendiente de japoneses e italianos, vivió durante años en Mar del Plata, lugar donde tiene base su historia, una especie de novela de investigación, ya que sus personajes son reales.

Victoria nos cuenta la historia de la familia Vespolini, quienes crearon y patentaron los sorrentinos, después de su instalación en Mar del Plata, al migrar de Sorrento. El relato de Higa es muy familiar y simpático. Nos adentra en las historias más íntimas de la familia, nos da un panorama muy explícito del funcionamiento interno de una familia con la cultura italiana muy arraigada. Y así entendemos el lugar de las mujeres en los negocios familiares, el de los más chicos, el proceso para integrar a un nuevo miembro, el trato para con el primo o la prima poco queridos, pero sobre todo la unión de un grupo de gente, el apoyo incondicional ante los peores escenarios, el amor a pesar de cualquier cosa.

Con los relatos familiares recogidos por Higa me reí, pero también sentí gran pesar. Es una novela ligera, entretenida y con un gran aporte cultural. Me alegra muchísimo haberla podido leer y espero que quien se la cruce en la librería se atreva a elegirlo y así saber de dónde vienen realmente los sorrentinos, que jamás deben cortarse con cuchillo ni pueden estar rellenos con cualquier cosa.

Ir a comer en la trattoria es mi cosa pendiente para cuando vaya a conocer a Mar del Plata 💕

Terminado de leer el 22/02/2020

3 breves cuentos que dejan al descubierto mucho de la cultura rusa. Me resultó muy curioso el empleo de nombres completos cada vez que se menciona a alguien, imagino que obedece a una necesidad de nombrar y clasificar todo, pues al nombre le acompaña cargo o profesión. Parece una tontería pero es un elemento común en todos los cuentos.


De los 3, Misiús fue el que más me gustó: una historia basada en las convicciones de las personas y cómo algunos no soportan ser contrariados, aunque la Vendetta cueste la felicidad de otros.



Los relatos son interesantes, cargados de realismo, de rutina, de la vida misma en expresiones sinceras.

Terminado de leer el 20/02/2020

Publicada en 1985, la distopía de Margaret Atwood invita a una profunda reflexión acerca de los cánones sociales y religiosos y cómo se emplean, en un sistema totalitario, como arma de control y reproducción. 

El argumento del libro es hoy mundialmente conocido gracias a la serie. Vi 2 capítulos pero, debido a mi falta de compromiso para ver series por mi cuenta, no la terminé. Aunque la muestra fue suficiente como para estar interesada en la obra literaria. 

La novela se desarrolla paralelamente en dos tiempos, la actualidad que nos relata su protagonista, Defred, y sus recuerdos, constituidos todos antes del golpe militar que convertiría a la República de Gilead en un gobierno totalitario, teocrático y fanáticamente religioso. 

La premisa es, básicamente, que la mujer es despojada de todo lo que constituye la libertad. Incluso se le prohíbe leer, escribir, comunicarse con personas que no sean sus "propietarios". Las criadas no son más que vientres sanos dispuestos a familiares de poder para que puedan procrear próximas generaciones; tener los hijos de otras personas, las "esposas", otras mujeres privadas de su autonomía pero que gozan de muchos más derechos que las criadas. 

Pero Defred no nace siendo criada, todo el cambio ocurre cuando ya tiene una familia constituida: su marido Luke y su pequeña hija. Vivimos la experiencia de una mujer asignada a la familia de un comandante, sin poder dejar de pensar en qué habrá ocurrido con las personas que amaba, a quienes perdió cuando trataban de escapar del régimen. 

"El cuento de la criada" es una novela extensa, muy llevadera, interesante y de fácil lectura. De a ratos con un tono bastante violento y arrasador, ya que no oculta las persecuciones propias de un régimen, los asesinatos, desapariciones forzadas y torturas. 

Quien me prestó el libro me advirtió que tenía un final absurdamente abierto. Y coincido. Así que si alguien detesta los finales abiertos, no lo recomiendo. Voy a pasar meses pensando una forma de haber cerrado un poco más ese final, así lo puedo cerrar en mi mente porque me dejó una angustia importante. 

Terminado de leer el 18/02/2020


Con «Asesinato en el Orient Express» me estreno en la literatura de la británica Agatha Christie, la autora más famosa dentro del género policial y quien ostenta el Guinness de la novelista que más obras ha vendido en todos los tiempos. Del género, publicó 66 libros.


Al principio, sentí la historia un poco lenta. Más adelante entendí que cometía el error de comparar lo que leía con las historias de Sir Arthur Conan Doyle. Pero no son comparables Hércules Poirot y Sherlock Holmes.



Poirot, detective que protagoniza muchos de los libros de Christie, me resultó bastante callado, reservado, calculador, racional y detallista en extremo. Si hay algo de ego en su accionar, como en todos los prodigios de algún área, no se vislumbra en demasía.



Desde la segunda parte, cuando arrancan con las entrevistas a los viajeros del tren, el libro me capturó por completo. El estilo de Agatha es uno milimétricamente calculado, lleno de detalles que luego resultan no escaparse. Nada se dice sin sentido entre sus líneas. Todo termina conectado y con significado.

Definitivamente leería otra historia, pero tampoco con intenciones de leer los 66 libros. Sospecho que hay un vórtice de elementos y tramas. Bien leí que la autora reconoció que escribía para agradar al lector. Y solemos querer las cosas siempre de la misma forma, sin alterar nuestras emociones y sabiendo que siempre el bueno gana. Pero reconozco que leí una historia interesante, emocionante y reveladora.

Terminado de leer el 07/02/2020

Publicado en 1928, por un García Lorca —poéticamente maduro— empezando sus 30 años, es un conjunto de romances sobre la muerte, la noche, la santidad y la luna, que gira en torno de la cultura gitana, sus costumbres y amores.

Hacía mucho tiempo que no leía un libro de poemas y aunque la rima no es mucho lo mío, el alcance de Federico como relator es encantador. 

Los versos del español nos describen la lucha y encuentros del pueblo gitano con la Guardia Civil y el infortunio de dichas confrontaciones. 

18 romances que componen un breve poemario que nos abre los ojos a una realidad escondida de años remotos, lejanos pero no ajenos.

Terminado de leer el 03/02/2020


Un libro infantil con valiosas enseñanzas sobre los cambios, la persecusión de los sueños, la adaptación, los miedos y cómo podemos estar presos por ellos.

Los personajes no tienen un gran desarrollo, mas cada uno genera un vínculo sentimental con el lector. A mí, particularmente, el hachero de lata me parece el más completo de todos.

Hace años vi la película de 1939, con las características actuaciones del cine teatral de la época, y me gustó mucho. Pero el libro envuelve mucha más magia y encanto. Las historias de las brujas malas y buenas, los distintos pueblos con sus pintorescos y extravagantes habitantes, el gran Oz y los monos alados le dan vida a esta pequeña gran historia.

En el viaje de Dorothy a la ciudad Esmeralda, en busca del mago Oz, queda en evidencia que las cosas que sus amigos deseaban no eran realmente carencias, lo que habla de nuestra necesidad de reconocimiento. También es claro que cada uno deja a un lado sus miedos cuando de sí depende salvar o ayudar a otros.

Un grupo de 4, conformado por una niña, un león, un espantapájaros y un hombre de lata, se unen para alcanzar objetivos distintos, caminando de la mano de los otros. Al todos tener la misma meta, les es más simple vencer todas las vicisitudes que presenta el camino hacia algo nuevo.

De aquí en adelante, todo sería spoiler. Les invito a leerlo; si tienen hijos, con ellos, sino solos. Las enseñanzas son muy valiosas.

Terminado de leer el 31/01/2020